Dos de las tendencias es están incrementando la rentabilidad del sector franquicia son, por un lado, la especialización, con la que se da cabida a nuevas áreas de negocio que todavía no están explotadas, y, por otro lado, la oferta de una experiencia más personalizada, con la que adaptarse a las nuevas necesidades de los clientes y atraer un mayor número de los mismos. A raíz de estas dos tendencias clave surge un sector muy concreto y en pleno auge dentro de las franquicias: el marketing olfativo.
Mientras que el marketing es un conjunto de técnicas y estrategias que se utilizan para estudiar el comportamiento de los mercados, la gestión comercial y las nuevas necesidades, con el objetivo de incrementar las ventas y mejorar la comercialización; el marketing olfativo es una estrategia de ventas que consiste en implementar aromas que influyan en el hábito de compra de las personas al generar una emoción concreta en ellas o asociar un olor determinado a un producto o marca.
El poder del olor: ¿por qué realizar marketing olfativo?
El marketing olfativo permite a las empresas conectar con el consumidor a través de olores que provocan emociones y recuerdos específicos, con los que la marca se quiere asociar para aumentar el engagement de sus clientes. Esta conexión permite crear vínculos emocionales más duraderos, así como influir en las decisiones de compra como son el tiempo que pasan los consumidores en la tienda, el incremento del volumen de productos que compran, el cambio del estado de ánimo del consumidor o sus preferencias.
Numerosos estudios neuropsicológicos han demostrado que el olfato juega un papel muy importante en la percepción de un producto o un servicio. Por ello, las empresas de múltiples sectores empresariales buscan crear fragancias exclusivas y contar con experiencias olfativas personalizadas con las que reflejar su identidad de marca. En concreto, en cada sector de actividad, el marketing olfativo, aunque se enfoque en el incremento de ventas y el engagement, tiene diferentes funciones.
El marketing olfativo en el sector de los hoteles consigue crear aromas específicos que mejoran la experiencia de los huéspedes a través de fragancias sutiles en lugares como habitaciones y spas. El marketing olfativo utilizado en eventos como ferias, exposiciones o conciertos consigue generar una conexión sensorial y una experiencia más inmersiva entre los asistentes. Por su parte, los olores en las campañas publicitarias, fuera de espacios físicos, en anuncios o packagings, consiguen acercar la marca al cliente. Las fragancias usadas en espacios para transportes como estaciones de metro, autobuses o aeropuertos no solo mejoran la experiencia del viajero, con la creación de ambientes más agradables, sino que también consiguen reducir el estrés asociado al transporte. El marketing olfativo también funciona a la hora de crear experiencias lúdicas, con olores asociados a juegos, concursos o actividades interactivas, pero también en la educación, para crear un ambiente más idóneo para el estudio y la concentración.

Javier Arcas - Socio Fundador de Ambizone
Ambizone: referente en la creación de aromas con identidad propia
Las franquicias que han surgido dentro del marketing olfativo presentan un modelo de negocio muy rentable, al contar con una elevada tasa de fidelización y demanda, así como a un mercado altamente competitivo al pertenecer a un mercado que está despuntando y, en consecuencia, se encuentra poco saturado y con potencial de expansión. Una de las más representativas es Ambizone.
Al contar con un modelo de negocio que destaca por una gestión administrativa sencilla y con procesos automatizados, no necesitar local, tener una baja inversión y una estrategia de venta y comercial innovadora, alejada de la venta a puerta fría y el no cobro de canon y royalties, Ambizone se ha posicionado como una opción de inversión segura y con grandes oportunidades de negocio. Con diversos formatos de franquicia, adaptados tanto al perfil de autoempleo como inversor, Ambizone es la única marca que no obliga a compras anuales de equipamiento, lo que ofrece a los franquiciados decidir el ritmo de crecimiento de su negocio.
El modelo de facturación se basa en ingresos recurrentes a través de las cuotas mensuales de clientes de sectores tan variados como hoteles, salud, retail, oficinas, hostelería, casinos, estaciones de servicio, farmacias e, incluso, otras franquicias. A esta facturación recurrente, se le suman ingresos adicionales que provienen de sus servicios de instalación y mantenimiento de máquinas y aromas. Para conseguir que sus clientes reflejen su esencia, identidad y establezcan una conexión con sus clientes, la enseña cuenta con un diverso catálogo de productos, entre los que hay fragancias y ambientadores para hogares y negocios de origen natural o perfumado, difusores, controladores y eliminadores de olores, mikados, aerosoles y más.
Tras haber visto las ventajas de formar parte de un sector tan innovador como el marketing olfativo, Ambizone se alza como una opción rentable, que permite generar grandes ingresos, a través de una gestión operativa y de mantenimiento simplificada.